Muchos recuerdan al Everest porque fue el único que frenó a raya al inolvidable Río Guayas, campeón invicto del primer torneo profesional de 1951. Cuando se jugó la final del Torneo preparatorio, el 21 de junio de 1951, Everest formó con Bonnard; Flores y Villao, Pombar, Carlos Garzón y Valdivieso; Marcos Spencer, Layedra, Marañón, Matute y Guzmán. Esa noche derrotó al poderoso conjunto verdiblanco, al que hizo cuatro goles en una tarde magistral de la delantera everiana que conducía con talento y elegancia el ya desaparecido Gerardo Layedra. El 5 de septiembre volvieron a verse las caras en el torneo oficial, el primero de la historia del profesionalismo. Empataron a cuatro tantos después de haber estado el Everest en ventaja 3 a 1 y luego 4 a 2. En 1952 los everianos liaron maletas y se fueron a Centroamérica donde cumplieron notable actuación. Fue ese el año de la consagración de un arquero que pasó a la historia por su arrojo, seguridad y valentía: Hugo Mejía. Ya había pasado a Norteamérica por diez mil sucres el insuperable Alfredo Bonnard cuando saltó a la titularidad “El suicida”, como llamaron a Mejía, con quien conversamos hace unos días y nos aclaró que es orense y no lojano. En la suplencia estaba Carlos Alberto Sotomayor, este sí lojano legítimo, con una clase enorme que la puso en evidencia cuando pasó a Patria y fue el arquero del equipo que ganó invicto el torneo de 1958.
En ese recordado equipo de Everest surgió a la fama el más grande futbolista ecuatoriano de todos los tiempos: Alberto Spencer Herrera. Había debutado en mayo de 1954 en un torneo organizado por los milagreros de Unión Deportiva Valdez y alternó algunos partidos durante esa temporada. Su fama arrancó en 1955. El 19 de junio salió ante Emelec como reemplazo de Aníbal Marañón y causó una agradable impresión. Eso le sirvió para ser titular el 7 de julio ante 9 de Octubre, equipo que cayó por 1 a 0, gol conseguido con un soberbio cabezazo de Spencer. Ese mismo día, en el segundo tiempo, Marcos Spencer fue reemplazado por un menudo y velocísimo puntero derecho que luego le birlaría el puesto: Pedro Gando. La carrera de Gando se agrandó en 1963 cuando fue elegido el mejor alero derecho del Sudamericano de Bolivia y se lo llevó Millonarios, equipo con el que fue campeón en 1963 y 1964.
1962 fue el gran año del Everest cuando conquistó el título nacional en una electrizante final ante Barcelona. Los desvelos de Manuel Chedraui, Alfredo Isaías, Luís Arcentales y otros dirigentes tuvieron su premio cuando Mejía, Carlos “Maestrito” Flores, Jorge Spencer, Hugo Pardo, Pepe Jonson, Vera, Pedro Gando, Galo Pinto, Néstor Azón, Carlos “Titán” Altamirano, Pepe Aquiño y el “Tanque” Horacio Romero llevaron al cetro nacional al “Rodillo rojo”. Ese año surgieron a la fama Galo Pinto, hermano de desaparecido Daniel “Pata de chivo” Pinto, que fue el goleador del torneo, y el rápido, astuto y eficaz Néstor Azón, un goleador nato. Después fue entrando en un cono de sombras y hoy no se sabe si existe en alguna de las divisiones inferiores o si desapareció.
(Junio 10 de 1990)
1 comentario:
cual fue el dt de everest en 1962 y cual es el nombre del jugador vera, muy buen articulo felicitaciones
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