lunes, 25 de febrero de 2008

Técnicos de cartel en el fútbol nacional


Tres figuras del fútbol mundial dirigen los equipos porteños en la edición del Campeonato Nacional de Fútbol que se inicia hoy. Detrás de cada nombre hay una historia que queremos sintetizar en esta columna.
Luís Meirá es llamado “Jouber” por esa manía brasileña por los apodos y tiene bajo su mando al equipo de Filanbanco. Hace algunos años narró a una revista argentina el orígen de su nombre: “Cuando era chiquito venía a casa un amigo de papá. Era francés....se llamaba Jouber y me decía Jouber a mí. Ya lo sabe...me quedó”. Jouber fue marcador lateral derecho de Flamengo, equipo al que sólo llegan las estrellas, pero con modestia confesó una vez: “Como jugador era bueno, pero no grande”. Fue entrenador de Flamengo entre 1973 y 1975. Volvió en 1985 en la gran época de Zico y Bebeto. Ese añ decía: “Mi idea es jugar con cuatro atrás, cuatro en el medio y arriba Zico y Bebeto. Esto no es esquemático. Quero atacar con muchos jugadores, pero con sorpresa. Es la única manera de llegar al arco contrario con el fútbol de hoy”.
Oscar Miguel Malbernat formaba parte de Estudiantes de La Plata cuando nuestro Barcelona lo derrotó en su propio reducto en la histórica victoria de abril de 1971. Tiene por qué acordarse del equipo que hoy le toca dirigir. Jugó en Boca Juniors, Racing Club y en Estudiantes del que fue capitán y con cuya enseña logró el título metropolitano de 1967 y fue subcampeón del Nacional 67 y del Metropolitano 68. Logró tres Copas Libertadores de América: 1968, 1969 y 1970. Fue campeón Interamericano de 1969 y campeón en la Copa Intercontinental de Clubes en 1968. Estuvo en la final de la Libertadores 67 con Palmeiras en Montevideo formando en Estudiantes con Poletti; Malbernat, Aguirre Suárez, Madero y Medina; Bilardo, Togneri y Pachamé; Ribaudo, Conigliaro y Verón. En el histórico empate con el Manchester en Inglaterra, que le dio a Estudiantes la Copa Intercontinental, el equipo que dirigía Oswal Zubeldía alineó así: Poletti; Malbernat, Aguirre Suárez, Madero y Medina; Bilardo, Togneri y Pachamé; Ribaudo, Etchecopar, Conigliaro y Verón. Malbernat las oficiaba de capitán del elenco estudiantil, cargo que desempeñó durante el ciclo de Zubeldía hasta 1971. En 1972 pasó a Boca Juniors formando línea defensiva con Suñé, Mouzo y Rogel. En 1973 en Racing alineó en la defensa con García Sangenis, Domínguez y Tonconé. Se graduó como director técnico el 25 de noviembre de 1982 en la Escuela de la AFA que dirige José D”Amico y fue adiestrador de Argentino de Quilmes, Sarmiento de Junín, Estudiantes de La Plata y Deportivo Quito.

El director técnico de Emelec, César Guillermo Reynoso, formó en San Lorenzo de Almagro, campeón argentino de 1959, cuya alineación titular era: Carrillo; Martina, Cincino e Iñigo; Reynoso y Schiro; Facundo, Ruíz, Omar Higinio García, Sanfilppo y Boggio. Fue una figura destacada del fútbol argentino en una época en que había jugadores como Roberto Ferreyro, Rubén “Hacha brava” Navarro y José Varacka en Independiente; Rattin, Mouriño, el uruguayo Javier Ambrois y el “Piojo” Yudica en Boca Juniors; Omar Oreste Corbatta, Juan José Pizzutti, el “Marqués” Sosa y Raúl Belén en Racing Club; Amadeo Carrizo, Ramos Delgado, Norberto Menéndez, el peruano Oscar Gómez Sánchez y Ramacciotti en River Plate; Cielinsky, Avio y Conde en Vélez y muchos otros cracks de factura.Reynoso pasó a jugar en Racing en 1963 y alineó con Luís Carrizo, Anido, Mesías, Sacchi, Marchetta, Oleniak y Belén. Antes, el 31 de enero de 1962, fue preseleccionado por Juan Carlos “Toto” Lorenzo, junto a otros grandes jugadores, para formar la selección argentina para la Copa del Mundo Chile 1962. Entre sus compañeros estaban Amadeo Carrizo, Ramos Delgado, Marzolini, el “Cholo” Simeone, Rattin, Sacchi, Albretch, Corbatta, Sanfilippo, Pando, Oscar Rossi, entre otros. Estuivo con San Lorenzo en 1960 en la primera edición de la Copa Libertadores de América y formó la pareja de volantes del “Ciclón” con Ravecca. Ha sido director técnico de San Martín de Tucumán, al que llevó a los Nacionales de 1981, 1983 y 1985 y diriigió también a Deportivo Cuenca, Emelec y Barcelona.Si estas figuras del fútbol internacional pueden aportar como técnicos al progreso de sus equipos, Guayaquil puede repetir en 1990 los logros de 1989 para ver la Copa Libertadores en todo su esplendor en sus ediciones futuras. Desde hoy veremos qué pasará.
(Marzo 4 de 1990)

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